Entrenamiento de Personal
En granjas o ranchos grandes se recomienda desarrollar programas de entrenamiento del personal para el uso de técnicas adecuadas de eutanasia humanitaria. Como se mencionó anteriormente las habilidades y experiencia del personal son de suma importancia cuando se utiliza un arma de fuego o pistola de perno cautivo penetrante/desangrado o descerebrado por punción y/o inyección de KCl como métodos para la eutanasia en animales enfermos y debilitados. La experiencia ha demostrado que muchas personas (incluso aquellas con experiencia en el manejo del ganado) no tienen un buen conocimiento de los sitios anatómicos para una ejecución adecuada de estas técnicas. Además, se debe tener en cuenta que hay riesgos significativos para el operador (o espectadores con el uso de arma de fuego) siempre que se utilizan estos métodos de eutanasia. En granjas o ranchos grandes la mayoría, si no es que todas las personas deben estar familiarizadas con estos procedimientos y varios deben estar específicamente entrenados para llevar a cabo este procedimiento. Sin embargo, sólo se le debe permitir llevar a cabo la eutanasia a aquellos que demuestran un conocimiento práctico y aptitud en las técnicas. Cuando estos métodos no se aplican en forma adecuada, los animales pueden llegar a sufrir daño, pueden tener diferentes grados de conciencia, y sentir dolor y angustia innecesarios.
Las personas con experiencia deben asistir en el entrenamiento del personal sin experiencia utilizando partes de animales muertos para demostrar los sitios anatómicos y la aplicación de las variadas técnicas. Este entrenamiento en cadáveres de ganado se debe seguir hasta que el personal en preparación llegue a ser competente con el equipo y técnicas de eutanasia. El personal también debe saber cómo confirmar la muerte.
Consideraciones Estéticas
Tanto el uso de arma de fuego como la pistola de perno cautivo penetrante son procedimientos no estéticamente placenteros. La eutanasia por cualquiera de estas técnicas resulta en movimientos involuntarios que pueden ser inadecuadamente interpretados como signos de dolor para una persona sin experiencia. Por lo tanto, cuando y donde sea posible, se recomienda llevar a cabo estos procedimientos en áreas fuera de la vista del público.